El
lumbago o dolor de espalda baja, es una dolencia muy frecuente en nuestros
días. Las malas posturas, el ejercicio físico y formas inadecuadas de cargar
peso son las causas mas frecuentes. No puede decirse que la lumbalgia sea una
enfermedad, sino más bien se trata de un problema o un síntoma ya que significa
dolor lumbar (dolor en la parte baja de la columna) y puede deberse a múltiples
factores. Esta patología se ha conocido familiarmente como “dolor de riñones”.
Es una dolencia que afecta principalmente a la zona lumbar y la causan
alteraciones de las diferentes estructuras que forman la columna vertebral como
ligamentos, músculos, discos vertebrales y vértebras, según la Sociedad Española
de Reumatología. Pueden establecerse dos causas fundamentales que pueden
ocasionar el lumbago: las causas de origen mecánico y las de origen
inflamatorio. El diagnóstico del lumbago no ofrece dificultad debido a que los
síntomas de la enfermedad son muy claros. Para determinar la causa que ha
producido esta dolencia es preciso realizar un interrogatorio sobre los hábitos
de vida del paciente así como su situación anímica, ya que en ocasiones se
puede relacionar la lumbalgia con factores psicológicos.
El tratamiento de la
lumbalgia según la medicina “tradicional” consiste en la administración de
analgésicos, relajantes musculares y aplicación de calor en la zona dolorida.
Asimismo, el paciente debe guardar reposo en una cama dura. Hoy en día tiende a
aconsejarse el reposo mínimo posible, evitando que sea superior a 48h ya que un
tiempo de inmovilidad superior puede llegar a ser contraproducente. En la mayoría
de los casos, los analgésicos y antiinflamatorios enmascaran el problema, ya
que sólo eliminan o suavizan los síntomas, pero no tratan la causa.
El masaje en el dolor
de espalda incluye una manipulación suave de la zona que va a relajar la
musculatura, así como los ligamentos, y estructuras vertebrales, disminuyendo
el dolor y la inflamación. Al mismo tiempo, las vértebras van a recuperar su
posición correcta de manera gradual, sin movimientos bruscos, lo cual, en la
mayoría de los casos, eliminarán la causa de la lumbalgia, tanto si es de
origen mecánico como inflamatorio. El masaje se aplica a toda la espalda, ya
que toda la musculatura está relacionada entre si, no vamos a masajear únicamente
la zona dolorida.
Al contrario de lo que
mucha gente piensa, una sesión de masaje no va a solucionar la lumbalgia en la
mayoría de los casos, pero si experimentará una mejoría desde el primer
momento. Se recomiendan al menos 3 sesiones repartidas en días alternos para
lograr los mejores resultados.
En cualquier caso, el
mejor tratamiento es la prevención, por lo que aconsejamos que periódicamente
reciba un masaje, para evitar que aparezcan dolores y contracturas, y en caso
de que se detecte alguna anomalía, se pueda tratar antes de que vaya a más y se
convierta en un problema grave.
Existen otras terapias
alternativas que son eficaces, como la acupuntura, en la que el terapeuta
aplicará agujas en las zonas adecuadas para disminuir el dolor y la inflamación,
equilibrando la energía en el organismo para permitir su curación.
Si necesitas información sobre tu caso particular o quieres reservar una consulta individualizada, puedes ponerte en contacto a través del teléfono 603 663 234 o tumasaje3@gmail.com